El estrés crónico social [parte 1]
Este trastorno de ansiedad es el estrés eminentemente humano y el más destructivo enemigo del hombre civilizado. (Primera parte)
El stress crónico social es uno de los factores determinantes en la aparición y perpetuación de la mayoría de las enfermedades de base nerviosa, conocidas como neurovegetativas, y de los procesos con tendencias compulsivas o adictivas (alcoholismo, farmacodependencia, tabaquismo, obesidad y anorexia-bulimia).
De todas las tendencias compulsivo-adictivas, las descargas alimentarias que eternizan la obesidad se hallan en primer lugar de los síntomas del stress crónico.
Ante esto se advierte que obesidad y stress, con las descargas alimentarias como nexo entre ellos, son problemas íntimamente entrelazados.
Todos los seres vivos responden, ante la posibilidad de amenazas externas, con una serie de mecanismos defensivos que tienen por objeto lograr la forma de protección más adecuada para enfrentar dicha situación. En los mamíferos superiores, estos mecanismos de defensa conforman el Sindrome General de Adaptación o Stress.
El Sindrome General de Adaptación, es un mecanismo “paradójico” pues, como favorece la supervivencia del individuo frente a los factores hostiles que lo agreden, también puede trastornar su funcionamiento orgánico hasta el grado de producir su propia muerte.
En el año 1925, Walter Bradford Cannon, describe la existencia de un mecanismo primitivo de defensa que se observa, indefectiblemente, en todos los sujetos sometidos a condiciones extremas tales como la exposición continua al frío, la privación de oxígeno o la pérdida de sangre.
Ese mecanismo de defensa es la reacción de lucha o huida (Fligth or Figth). Lucha o huida es la reacción que instintivamente encaran los individuos al sentir amenazado su equilibrio orgánico.
De la aguda observación de Cannon nace el término homeostasis; entendiéndose por homeostasis al “…Estado ideal de equilibrio orgánico”, el cual se puede lograr gracias a la activación de la parte más profunda y animal de nuestro sistema nervioso, el denominado Sistema Nervioso Autónomo Simpático Adrenal, sistema que va a ejercer su acción por medio de la descarga de su principal hormona, la adrenalina.
De los estudios realizados por Cannon surge que la tendencia básica de todo individuo es, mediante la utilización de complejos mecanismos amortiguadores y hormonales, tratar de volver al estado de perfecto equilibrio orgánico, es decir volver a estar en homeostasis.
Una década más tarde, en el año 1936, en un artículo de la revista Science, el fisiólogo austro-canadiense Hans Hugo Bruno Selye acuña la famosa palabra stress para referirse al índice de desgaste que sufre el cuerpo como consecuencia de la lucha contra los agentes amenazantes y peligrosos del mundo exterior. En términos entendibles: Stress es el costo orgánico que se debe pagar para superar airosamente las situaciones de agresión, crisis o conflicto que amenazan nuestra integridad como individuos.
De todas las tendencias compulsivo-adictivas, las descargas alimentarias que eternizan la obesidad se hallan en primer lugar de los síntomas del stress crónico. Ante esto se advierte que obesidad y stress, con las descargas alimentarias como nexo entre ellos, son problemas íntimamente entrelazados.
Todos los seres vivos responden, ante la posibilidad de amenazas externas, con una serie de mecanismos defensivos que tienen por objeto lograr la forma de protección más adecuada para enfrentar dicha situación. En los mamíferos superiores, estos mecanismos de defensa conforman el Sindrome General de Adaptación o Stress.
El Sindrome General de Adaptación, es un mecanismo “paradójico” pues, como favorece la supervivencia del individuo frente a los factores hostiles que lo agreden, también puede trastornar su funcionamiento orgánico hasta el grado de producir su propia muerte. En el año 1925, Walter Bradford Cannon, describe la existencia de un mecanismo primitivo de defensa que se observa, indefectiblemente, en todos los sujetos sometidos a condiciones extremas tales como la exposición continua al frío, la privación de oxígeno o la pérdida de sangre.
Ese mecanismo de defensa es la reacción de lucha o huida (Fligth or Figth). Lucha o huida es la reacción que instintivamente encaran los individuos al sentir amenazado su equilibrio orgánico. De la aguda observación de Cannon nace el término homeostasis; entendiéndose por homeostasis al “…Estado ideal de equilibrio orgánico”, el cual se puede lograr gracias a la activación de la parte más profunda y animal de nuestro sistema nervioso, el denominado Sistema Nervioso Autónomo Simpático Adrenal, sistema que va a ejercer su acción por medio de la descarga de su principal hormona, la adrenalina.
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